En días pasados, fui invitado para establecer los lineamientos de un Club de Cata entre amigos. Cabe mencionar que todos los que asistimos somos amigos de la escuela (uff! ya llovió! jeje), y aún cuando no nos frecuentamos mucho, hoy descubrimos que además de la hermandad provocada por compartir Alma Mater, hoy nos reúne un gusto compartido, el gusto por el Vino!
Ya me habían pedido antes que organizara la primera reunión, sin embargo no quise hacerlo para que se diera de manera natural esta reunión y sin que yo interviniera en todo, pues peligrosamente se podría convertir en “mi” Club de Catas, y esto corre un gran riesgo, pues como todo Club, debe haber participantes, y los participantes deben compartir no solo los beneficios, sino también la responsabilidad de pertenecer a un Club, se trate de lo que se trate. Estamos de acuerdo, verdad?
A lo largo de estos años de mi vida con el vino he visto grandes casos de éxito en el que por años, Clubes de Cata continúan sus aventuras catando vinos y conviviendo sanamente. Sí, tal vez algunos miembros se quedan en el camino, pero otros nuevos se suben entusiasmados para aprender y disfrutar del vino. Al final te doy mis recomendaciones para crear un Club de Cata de Vinos entre amigos.
Creo que lo importante es poder contar con otras personas que tienen un fin común, en este caso, conocer nuevos vinos, para poder seguir aprendiendo de este vasto y maravilloso mundo.
Si tú eres de los que te gusta probar nuevos vinos, y le das la oportunidad por igual a botellas de bajo costo, y por supuesto, haces lo posible y te preparas para apreciar un “buen” vino, tal vez el pertenecer a un Club de Cata sea para ti. Si además cuentas con amigos que comparten tu gusto por el vino, tal vez quieras organizar uno.
Por lo pronto, déjame platicarte cómo nos fue en nuestra primera reunión.
Convocatoria al Club de Catas
14 personas se apuntaron inicialmente al Club de Cata, que repito, no organicé yo de inicio, pues no quería tener toda la responsabilidad de convocarlos a todos, de reunirlos, de decirles qué es lo que debiéramos catar, comer, ya que correríamos el riesgo de que fuera el Club de Nacho para catar vinos, y perder la esencia de disfrutar esto en comunidad. Así que esperé a que el grupo madurara y ya que estaban formados y apuntados, y me convocaran para decirme que ya estaba listo el grupo para que iniciáramos el Club de Cata. De esta forma les pedí que me permitieran organizar la primera cata en base a un tema.
En efecto, parece ser que yo soy quien más entrenamiento tiene para catar vinos, ya que tuve la fortuna de estudiar para Sommelier, sin embargo, aún no compruebo -y realmente no me interesa comprobarlo- que sea yo quien haya catado más vinos de todos, ya que en el grupo existen aficionados que incluso descorchan una botella en la primera oportunidad que tienen, incluso, en ocasiones, diario!
Lo que sí hice de inmediato, es que estas reuniones debían tener un propósito centrado en el vino, y que no se convirtieran en una reunión más en la que se hablara de cualquier cosa antes que hablar de vino. Dejé muy claro que si este no era el objetivo principal – disfrutar y conocer nuevos vinos – no me interesaría participar!
Finalmente, al tener una estructura más sólida que mis compañeros, también quise tener la responsabilidad de guiarlos en cuanto a cómo debían ser estas reuniones y la eventual formación de un auténtico Club de Catas.
Selección del Tema de la primera Cata
Por la interacción que tenemos en otros grupos de Facebook y de Whatsapp, sé que varios de ellos disfrutan de vinos españoles, pero también por algunos comentarios, hay algunos conceptos que no estaban bien definidos, por lo que quise comenzar con un tema que la mayoría estuviera de acuerdo en abordar y les propuse que tuviésemos una cata para ver la expresión de la uva Tempranillo en las principales regiones de vino de España. Dado que originalmente éramos 14 personas, sugerí que analizáramos una referencia de cada una de las 3 principales regiones que usan la uva Tempranillo como base para sus vinos tintos, y posiblemente adivinaste, propuse Ribera del Duero, Rioja y Toro.
Organización de la 1ª Reunión
Una vez que acepté integrarme ya al Grupo de entusiastas para formar este Club de Catas, quien convocó a todos, nos reunió en un Grupo de Whtasapp para poder ponernos de acuerdo en nuestra primera reunión.
Permíteme decirte que los Grupos de Whatsapp hoy permiten tener una comunicación fluida, y además de compartir los comentarios, puedes compartir las fotos que todos toman, videos incluso, y también, te permite tener una herramienta democrática que son las encuestas.
Ahí compartimos las reglas básicas que seguramente iremos modificando, pero estas te sirven para plantear una base de las reuniones del Club.
Ok, continuando con la reunión, el organizador se ofreció como el primer Anfitrión de nuestras reuniones, y sugerí que en esta ocasión y tratándose de Vinos Españoles, nos iría muy bien una combinación de Quesos, algún tipo de Ibérico, y Baguettes, así de simple, la intención en esta primera reunión no era el de hacer ya un maridaje con los vinos, sino más bien plantear las bases de nuestras reuniones futuras, ejemplificando con la primera.
Sesión de Cata
Como mencioné antes sugerí que incluyéramos tres referencias de vino distintas, una para cada Denominación de Origen de Ribera del Duero, Rioja y Toro. Por la cantidad de personas confirmadas se llevaron 2 botellas de cada referencia. Al respecto puedes hacer un cálculo sencillo de media botella por asistente. En este caso, confirmamos 11 asistentes, por lo que nos da un cálculo de 5.5 botellas (que automáticamente sube a…) 6 botellas, dividido entre 3, nos dio 2 botellas de cada región. Aquí te sugiero que sea la misma cantidad de botellas de cada tipo de vino.
Catamos Arzuaga Gran Reserva 2016 de la DO Ribera del Duero, Finca La Quintanilla 2019 de la DOCa Rioja – Rioja Alavesa – y San Román 2019 de DO Toro.
Sí, sé que estás pensando que el Arzuaga Gran Reserva iba a destacar sobre los demás, y tienes razón, cumplió y sobrepasó nuestras expectativas, un gran vino sin la menor duda!! Pero esto es lo bueno de un Club de Catas, la libertad de acción, pues la idea es disfrutar de los vinos y aprender en el proceso. Recuerda que el tema principal era conocer la uva Tempranillo, no era la intención de comparar cuál iba a ser el mejor, ya que esto nos hubiera implicado igualar las condiciones (misma añada, mismo tipo de envejecimiento, y tal vez, incluso, mismo rango de precio).
En un Club de Catas, la idea es probar nuevos vinos y aprender de lo que podamos aportar durante la cata. En esta ocasión, creo que aprendimos mucho.
Aprendimos que un Gran Reserva de Arzuaga es un señor vino, redondo, taninos suaves, tersos, una gran expresión de fruta, un color profundo, violáceo, intenso, joven, que fácilmente se antoja para disfrutarlo solo. El Gran Reserva posee un añejamiento de cuando menos 48 meses de añejamiento, con 24 meses en barrica y al menos otros 24 meses en botella. Al ser 2016, tenía un par de años más en botella, madurando, que sin duda le fue de maravilla!
En el caso del Rioja, Finca La Quintanilla 2019 se trata de un Viñedo Singular, es decir, el vino se produce con una parcela determinada y aprobada como Viñedo Singular, y de viñas viejas de más de 60 años, con 24 meses en barrica. Al momento de consumirlo, este vino tenía 12 meses en botella. Aquí aprendimos que la uva tempranillo agradece el añejamiento, pues el vino resultó sumamente joven, no muy expresivo al principio, le costó trabajo abrir, pero con una calidad aromática indiscutible, en la que seguramente estaremos probando una botella de este vino en unos años, y sin duda, será un gran vino, pero aún le faltó al momento de la cata. El aprender a distinguir cuando un vino está o no en su mejor momento, es un gran aprendizaje, e identificar si un vino es o no de guarda y calcular aproximadamente cuántos años de guarda para expresar lo mejor que tenga. En este caso, pensamos que unos 4 años más en botella comenzará a expresar lo mejor de sí, y en el caso de estos vinos, posiblemente tendrá una guarda de 15 a 20 años sin problema.
Finalmente, para la DO Toro, mi amigo Mauricio Jiménez de La Castellana nos recomendó Bodegas y Viñedos San Román 2019. Manufacturado con Tinta de Toro 100% (así se conoce a la Tempranillo en esta Denominación de Origen, y este vino al igual que el anterior tiene 2 años en barricas y un año escaso en botella. De este vino aprendimos sobre el cuerpo que producen suelos areno-arcillosos, de la intensidad que provoca una región con mayor exposición al sol, casi 14.5º de alcohol, y aunque es un vino joven comparado con el primero. Evolucionó en copa de una manera maravillosa.
Algo adicional, que fue una pequeña sorpresa para todos, fue que utilicé formatos para calificar el vino, y que aprendimos a utilizar. Creo que esto nos va a servir mucho para poder tener un registro de los Vinos que catemos a lo largo de la historia del Club de Catas, y que nos puede llegar a dar motivo para temas de Revisión, tal vez con una cata con los mejores vinos que hayamos catado en cada ocasión, o simplemente como referencia de lo sucedido en las catas. Al final te dejo una liga para que puedas revisar cómo utilizar este formato y bajarlo si así lo deseas.
Nos sorprendió a todos la intensidad de color de las 3 regiones, ya que esperábamos que Toro tuviera una mayor intensidad de color, pero tanto el Arzuaga como el Finca Quintanilla prácticamente igualaron la intensidad de color del de Toro.
Acompañamos la cata de una buena selección de quesos semi-madurados, ibérico y tortilla española (que otro de los integrantes del Club se ofreció a cocinarla personalmente), con unas baguettes bastante decentes y con esto pasamos una velada sensacional, dando lugar al vino para aprender de lo que nos puede demostrar, y platicando entre amigos en una primera reunión que sin duda salió estupenda, pues ya estamos planeando la segunda.
Como conclusión pudimos apreciar lo majestuoso de un Gran Reserva de Ribera del Duero, aprendimos que no todos los vinos están listos para disfrutarse al momento en el que salen al mercado, pero que sin duda, una vez que maduren, serán estupendos como el Rioja Alavés de Finca La Quintanilla, y pudimos apreciar el vigor y al mismo tiempo, el equilibrio de un vino de otra gran región española como lo es DO Toro con este San Román 2019, en el que cabe aclarar, que todos conocían de la existencia de la DO Toro, pero que pocos lo tenían identificado como un vino a la altura de las otras dos DOs.
El gran ganador por unanimidad fue el Arzuaga Gran Reserva 2016 de Ribera del Duero, incluso entre miembros que suelen abrir buenos Riojanos. Que el Finca Quintanilla 2019 Rioja Alavesa, debe esperar sus mejores momentos en unos años, 3 al menos y que seguramente será un gran vino por la evolución que tuvo en copa durante la reunión. Y que la revelación para la mayoría fue el San Román 2019 de Toro, ya que sin llegar a tener la complejidad del Arzuaga, evolucionó de forma impecable en copa. Hay que recordar que todos tienen 2 años en barrica de añejamiento.
Si deseas iniciar un Club de Cata, te recomiendo que leas los lineamientos que planteo para CREAR UNO AQUÍ, y mucha suerte!!
Si deseas aprender a utilizar un formato para evaluar vinos, DA CLIC AQUÍ.
Agradecemos enormemente el apoyo prestado por DO Ribera del Duero, Fufluns, IM Wine, y La Castellana para iniciar exitosamente esta primera sesión de este Club de Catas que recién formamos.
